El caso es que este viernes y antes del desembarco de Normandia de escaladores del fin de semana, nos acercamos a Barrosa, Ana,Joseba, Ekain y yo. La vía estaba en unas condiciones más que aceptables pese a que chorreaba bastante, y eso que hacia frío del bueno pero es que el otoño anomalmente lluvioso que ha soportado el valle de Bielsa este otoño hace que todas las barranqueras bajen con un caudal más propio de la primavera, y claro para parar eso completamente haría falta una glaciación.
En fin, buen día de escalada entre risas y apretones. Que gusto escalar con amigos.
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